CTXT, 29 de agosto de 2018
Las empresas han dejado de aportar al Estado 22.000 millones
desde 2007. Tras el fraude fiscal, es la segunda ‘grieta’ más
importante por la que España pierde ingresos.
Desde su llegada a La Moncloa, Pedro Sánchez anunció como una de sus
medidas estrella la subida de los impuestos a las empresas. Establecer una tributación
mínima del 15% del beneficio contable en el Impuesto de Sociedades es una medida
más recaudatoria que la eventual subida en los tributos medioambientales, el eventual
impuesto a la banca o en la implantación de la denominada tasa Google. En cualquier
caso, ¿pagan, o no, las empresas españolas los impuestos que deberían para sostener
el gasto público y el Estado del Bienestar?