Eugenio del Río
El último libro de Josepa Cucó: De la utopia
revolucionària a l’activisme social. El Moviment
Comunista, Revolta y Cristina Piris

Muchas veces lo he pensado: qué difícil es entender lo que fuimos y lo que hicimos quienes participamos en las organizaciones de la izquierda radical de hace medio siglo. Y si es difícil entenderlo, seguramente lo es mucho más explicarlo. La dificultad máxima reside en transmitirlo a jóvenes de hoy.

La explicación, en estos casos, requiere de asideros que estén al alcance de las últimas generaciones. Esos asideros son los hechos que conocen de primera mano y que presentan algunas analogías con los que rodearon nuestras existencia en los años sesenta, setenta, ochenta… del siglo XX. El problema estriba en que el campo de las analogías entre aquellos años y los actuales es excesivamente reducido.

Josepa Cucó i Giner lleva años buceando en aquel pasado y en sus desarrollos posteriores, lo que ya de por sí es digno de encomio. A ello ha dedicado su último libro (*). Su objeto es el Movimiento Comunista (MC) (1971-1991) y el Moviment Comunista del País Valencià (MCPV), así como su heredera, desde 1994, Revolta, y la original experiencia de lo que vino a ser un dinámico centro socio-cultural en València: Ca Revolta. Ha indagado también en las organizaciones post-MC.

Su libro se ha abierto paso siguiendo la pista a un colectivo que, a lo largo de los años, ha experimentado importantes cambios, no siempre son fáciles de discernir y de aprehender.

Para conseguirlo, Josepa Cucó consagró mucho tiempo y esfuerzos durante ocho años.
En su labor etnográfica ha realizado 29 entrevistas en profundidad –sin contar las referidas a las historias de vida–, ha consultado una ingente cantidad de documentos y textos, ha llevado a cabo un trabajo de campo –observación activa– que ha incluido la participación en reuniones internas y en actos de todo tipo.

En su investigación hallamos algo que no siempre se encuentra en quienes se lanzan a la arriesgada empresa de reconstruir un itinerario, complejo, diverso y duradero. Me refiero a esa combinación de toma de distancia, imprescindible para observar con realismo el objeto de la indagación, y de la imprescindible empatía para hacerse con los seres humanos que dieron vida a la experiencia en cuestión. La  empatía era particularmente necesaria para entender el funcionamiento de unas mentes juveniles, las nuestras, a través de un lenguaje exótico y de unos marcos ideológicos bastante extravagantes y fantasiosos.

Distancia y empatía son dos piezas, insustituibles ambas, que, si no se  encauzan y calibran debidamente pueden acabar dañando al resultado. La autora del libro ha conseguido combinar adecuadamente las dos. Y cuando digo distancia no se entienda indiferencia hacia los sujetos humanos que son la materia de este libro. Es posible, y así lo demuestra Josepa Cucó, mantener una mirada realista sobre las personas y, a la vez, apreciarlas e incluso tejer nuevos vínculos afectivos, como ella misma precisa, con quienes han sido el objeto de su trabajo.

La autoexigencia de la autora ha dejado su huella en este libro que penetra en los secretos de la trayectoria de una organización singular, con una perspicacia y rigor que llaman la atención.

El volumen incluye dos partes diferenciadas.

La primera –los tres primeros capítulos– ahonda en la historia y analiza la experiencia colectiva, entrando en terrenos que no habían sido abordados por estudios anteriores, como es el seguimiento del curso de las distintas organizaciones territoriales, con especial atención al País Valencià, a Andalucía y al País Vasco.

La segunda –otros tres capítulos– contiene dos historias de vida, precedidas de un capítulo en el que suministra valiosas indicaciones sobre las dos personas y el enfoque metodológico seguido. La primera historia de vida es la de Manuel Juan, que tuvo responsabilidades durante muchos años en el colectivo en el Sur de Alacant, especialmente en la comarca de Elda-Petrer. La segunda corresponde a Cristina Piris, fallecida en diciembre de 2003 y principal responsable de la organización valenciana desde1994.

Para quienes hemos andado el camino en compañía de Cristina, de Manuel y de tantas otras personas, es de agradecer la tarea acometida y completada con éxito por Josepa Cucó, su voluntad de encontrar explicación a asuntos no siempre fácilmente  comprensibles y en llegar al fondo de las cosas.

Las páginas que aquí comento, más allá del sabor agridulce que deja la evocación de una historia en la que hubo aciertos pero también errores de bulto, nos ayudan a asimilar nuestra propia biografía colectiva y a seguir avanzando.
____________
(*) Josepa Cucó i Giner, De la utopía revolucionària a l’activisme social. El Moviment Comunista, Revolta y Cristina Piris, València: Publicacions de la Universitat de València, 2016.

Eugenio del Río fue uno de los fundadores del Movimiento Comunista, al que perteneció mientras existió. Hoy forma parte de la Federación de Acción en Red, junto con personas procedentes del MC y los jóvenes que se han incorporado a esta Red en las dos últimas décadas.