El Confidencial, 18 de Mayo de 2023.
Hace 20 años, un domingo de diciembre, al salir de una manifestación, Imanol Zubero se preguntó cómo sería el día después, cuando todo se acabase. En la pregunta, quizás estaba ya impregnado el escepticismo o la sospecha de que aquella unidad no duraría y, sobre todo, la incertidumbre sobre cómo se tendría que construir una sociedad acostumbrada al miedo, al terror. Cómo pasar del tiro en la nuca y de los chivatos en el piso de al lado a la normalidad de poder discutir de ideas políticas en el mercado o en el bar. Imanol Zubero Beaskoetxea (Bilbao, junio de 1961) contempla esa desazón con el padecimiento personal de quien estuvo 12 años amenazado por ETA y la distancia profesional de un doctor en Sociología. Fue uno de los promotores de Gesto por la Paz y solo ha estado en política en una ocasión, en una de esas ofensivas finales de ETA en las que machacaba las Casas del Pueblo a bombas. En marzo de 2008, ETA asesinó a un concejal socialista, Isaías Carrasco <https://www.elconfidencial.com/espana/2008-03-08/un-padre-de-tres-hijos-sindicalista-y-futbolero-que-habia-renunciado-a-llevar-escolta_924027/> , cuando salió de su casa en Modragón, camino a su trabajo de cobrador en la autopista AP1, y Zubero aceptó, como gesto de apoyo, que el PSOE le incluyera en las listas del Senado como independiente por Vizcaya. Salió elegido, “un accidente electoral”, dice bromeando, y ahí se agotó la experiencia: “No sirvo para la disciplina política, por eso me expedientaron varias veces”.