Oxfam Intermon, julio de 2022.
En la última década, tres crisis han puesto a prueba a nuestras sociedades: la Gran Recesión, la pandemia de la COVID-19 y el conflicto en Ucrania. Las tres han provocado miseria e incertidumbre, han acentuado desigualdades ya existentes y han desgastado nuestros sistemas de protección social. Cada vez es más difícil resistir a los golpes y los impactos se extienden a más capas de la sociedad. Y mientras tanto, siempre hay alguien que sale ganando. Los ‘beneficios caídos del cielo’ del sector financiero, farmacéutico, energético y alimentario son un ejemplo de ello. Según cálculos de Oxfam Intermón, los ingresos conjuntos de las cuatro mayores empresas energéticas de nuestro país crecieron un 34 % entre 2020 y 2021. Es más, sus beneficios en 2021 fueron el doble de la media observada durante los cinco años anteriores. Solo las centrales hidroeléctricas y nucleares habrían generado entre marzo de 2021 y marzo de 2022 más de 6.500 millones de euros de beneficios extraordinarios.