EOM, 8 de septiembre de 2024.
Los partidos socialdemócratas europeos están comprando el discurso antiinmigratorio de la ultraderecha. La adopción de posturas y políticas más duras refleja un debate perdido. Si bien no pueden abandonarlo, su salida es volver a posicionar temas como la redistribución de la riqueza, que movilizan más a su electorado.
“Es imprescindible también el retorno de quienes han llegado a España irregularmente”. Con estas palabras, el presidente español, Pedro Sánchez, defendía por primera vez la expulsión de inmigrantes en situación irregular, con el argumento de desincentivar a las mafias que trafican con seres humanos. Sus declaraciones del pasado 29 de agosto en Senegal se produjeron días después de que el canciller alemán, Olaf Scholz, prometiera aumentar las deportaciones tras el atentado en la ciudad de Solingen.