infoLibre, 21de febrero de 2022.
El último bombazo –Suisse Secrets– divulgado por varios medios internacionales es una continuación del camino que abrieron los Panama Papers y los Paradise Papers. En un sentido, se trata de la misma historia de siempre. Cada vez que los periodistas levantan la cortina de secretismo detrás de lo que ocurre en el sector financiero entendemos mejor por qué el secreto es tan importante: redes de corrupción, personajes con actividades oscuras, una cantidad desproporcionada de clientes turbios, familias de dictadores y un puñado de políticos –en apariencia respetables– son atrapados en la red.