elDiario.es, 23 de febrero de 2024.
A la activista política y feminista se le prohibió regresar a su país en 2022 y, desde entonces, vive exiliada en Costa Rica. “El regreso es una promesa segura de cárcel, de malos tratos, de torturas”, afirma.
María Teresa Blandón Gadea tiene 62 años y es una de las líderes feministas más importantes de Centroamérica. Es nicaragüense, una nacionalidad que se acortaba en la palabra nica y se agrandaba en la idea de una revolución alfabetizadora que despertaba –como el café de sus tierras fértiles– la idea de un mundo con más reparto del sabor y del saber. La nacionalidad y la revolución se pusieron mezquinas, y le arrebataron a ella y a muchas otras la posibilidad de vivir en su tierra.