Xabel Vegas
Carta abierta a Antón Reixa
(Publicado en http://blogs.publico.es/xabel-vegas/)

Estimado Antón Reixa:

Creo que no nos conocemos personalmente, así que empezaré esta carta presentándome. Mi nombre es Xabel Vegas. Soy asturiano y músico, por ese orden. Fui miembro de Manta Ray, uno de los grupos de aquel movimiento musical de los años noventa que la prensa, de forma un tanto petulante, bautizó como Xixón Sound. Y desde hace casi veinte años soy socio de la SGAE, entidad que usted preside.

Empecé escuchando música siendo adolescente gracias a los vinilos que traían compañeros de instituto que pasaban las vacaciones de intercambio en Londres o que se iban de Erasmus al Reino Unido. Xixón es una ciudad de provincias y a malas penas llegaban discos de bandas independientes anglosajonas que entonces parecían reservados únicamente para madrileños y barceloneses. Sin ese contrabando de vinilos yo jamás hubiese sido músico. Sin eso y sin Radio Kras, una radio libre que desde hace más de 27 años es la voz de la cultura independiente y de los movimientos sociales progresistas de Xixón. En aquella “radio pirata”, como entonces se las llamaba, escuché por primera vez a grupos como My Bloody Valentine, The Pixies o Dinosaur Jr.

Radio Kras es una radio libre en el sentido más estricto del término. Ha dado voz a todos aquellos movimientos que han tratado de hacer de este mundo un lugar más habitable: feminismo, ecologismo, antimilitarismo… Se trata de una emisora sin ánimo de lucro, que se ha mantenido gracias a las aportaciones de un puñado de socios y al trabajo voluntario de sus locutores, que en muchos casos aportaban más buena voluntad que conocimientos de radiodifusión. Ha sobrevivido a pesar de los ataques que ha sufrido desde la administración, que se empeñaba en sancionar económicamente a un proyecto sociocultural como Radio Kras por ocupar un espacio en las ondas destinado a las radios comerciales. Muchos gijoneses crecimos cultural, política y socialmente escuchando el 105 de la frecuencia modulada y si Radio Kras hubiera sucumbido a esos ataques, esta ciudad en la que vivo habría sido más gris, menos viva y menos interesante de lo que hoy es.

Me dirijo a usted porque me he enterado de que la SGAE reclama 2328,08 euros a Radio Kras en concepto de derechos de autor. Soy socio de la SGAE desde hace casi veinte años y durante ese tiempo nunca he podido sentirme orgulloso de pertenecer a ella. Pero las últimas elecciones, en las que usted salió elegido, supusieron un soplo de aire fresco para una entidad de gestión de derechos que estaba atravesada por la corrupción y que se había ganado a pulso el odio de buena parte de la sociedad. Me consta, además, que usted es conocido por su sensibilidad social y por una visión de la cultura diametralmente opuesta a la que tenía la anterior presidencia de la SGAE. Por eso le rogaría que atendiese a la situación de Radio Kras y tratase de evitar el daño que la SGAE, junto con otras entidades como AGEDI-AIE (de la que también soy socio), está haciendo a un icono cultural de Xixón y que puede acabar con su cierre.

Como compositor defiendo los derechos de autor que tan mala prensa tienen en nuestro país. Creo que nadie debería lucrarse con el trabajo ajeno sin repartir los beneficios con los creadores. Me parece bien que se cobre a televisiones, radios y discotecas por utilizar mi música y ganar dinero con ella. No cuestiono en absoluto la necesidad de que exista una entidad que vele por nuestros derechos como creadores. Pero en ningún caso puedo aceptar que se utilice mi trabajo como excusa para cobrarle a una entidad sin ánimo de lucro cuyo único delito ha sido difundir la cultura independiente y hacernos crecer como músicos y como consumidores de música a toda una generación de creadores. Le pido por tanto que reconsidere la postura de la SGAE sobre este asunto y sobre tantos otros casos que pudiera haber en la misma situación. Sería lamentable que la SGAE fuese responsable del cierre de una radio que le ha dado tanto a la cultura de Xixón y sin la cual probablemente yo jamás hubiera sido músico. No permita que ese borrón se sume a la lista de despropósitos que ha trufado la historia de la SGAE.

Sin más me despido esperando que entienda la importancia que para mi ciudad ha tenido y tiene una emisora como Radio Kras. No permita que un proyecto tan hermoso vea su fin por un puñado de euros. Atentamente,

Xabel Vegas