marzo 2018
Resumen
El objetivo de este artículo es analizar una serie de iniciativas concretas que tuvieron lugar en España entre 1938 y 1940 como eco local del Bimilenario de Augusto celebrado en Italia. En todos estos actos el protagonismo de Falange, uno de los principales partidos fascistas entonces, fue fundamental, tanto en la dirección política como en la organización práctica. Los falangistas mantenían relaciones con los dirigentes mussolinianos y uno de los temas preferidos en su propaganda era la hermandad italo-española, que se remontaba a su común pasado romano y católico. En los primeros años del nuevo régimen franquista, esta ideología clasicista, en particular en torno a la figura de Augusto y la antigua Roma imperial, contribuyó a la conformación de la nueva identidad nacional, basada en un pasado glorioso.