El Grand Continent, 7 de julio de 2025.
Desde hace unos diez años, Maya Kandel sigue a los intelectuales del movimiento nacional-conservador que se han adherido y luego teorizado a posteriori el trumpismo.
Desde el Claremont Institute en 2016 hasta Curtis Yarvin en la actualidad, pasando por el Proyecto 2025 de la Heritage Foundation, nos ayuda a trazar las grandes líneas de esta historia y a identificar a sus protagonistas.
Hacer una arqueología de esta coalición ideológica permite comprender por qué ahora somos un objetivo: «la Unión es una gran potencia que molesta a los trumpistas».
Trump es sin duda el hombre más poderoso e influyente de Occidente: ¿tiene una doctrina? ¿Cuáles son sus principales coordenadas?
Trump no es ni un intelectual ni un ideólogo. En cambio, hay ideólogos, intelectuales del trumpismo. Por eso el libro trata sobre el «trumpismo», que hoy, en mi opinión, es más grande que Trump. Pero hay que matizar inmediatamente esta afirmación: Trump sigue siendo el factor perturbador de toda construcción doctrinal. Este es un punto esencial. Se ve especialmente en la política exterior, un ámbito en el que cabría imaginar que existe una doctrina que Trump debe esforzarse por aplicar.