CTXT, 19 de junio de 2019.
Los bancos estadounidenses poseen colectivamente 157 billones de dólares en derivados, aproximadamente el doble del PIB mundial. Esto es un 12% más de lo que poseían al comienzo de la crisis de 2008.
En los últimos 30 años, el capital financiero se ha convertido en dominante en las principales economías capitalistas, superando a la élite industrial en poder e influencia. Esta evolución ha llevado a que el sector productivo se vea cada vez más sometido a la dinámica volátil del sector financiero.
La centralidad de las finanzas en la actual economía mundial se pone de manifiesto por la creciente frecuencia de las grandes crisis financieras, a las que inevitablemente han seguido las recesiones. Desde que se inició la liberalización de los mercados de capitales durante la era Thatcher-Reagan a principios de los años ochenta, se han producido al menos 12 grandes crisis financieras. La más reciente ha sido la crisis mundial de 2007-2008, que también provocó lo que ahora se conoce como la Gran Recesión, de la que muchas de las economías desarrolladas no se han recuperado todavía.