El País, 7 de noviembre de 2021.
Casi la mitad (el 44%) de las diferencias de renta entre personas en España es explicable directamente por las desigualdades de origen de los ciudadanos y por factores que nada tienen que ver con los esfuerzos que hagan en la vida: la posición social y económica de los padres, el entorno cultural, el tipo de educación, etcétera. Son causas que no se eligen ni se pueden evitar. La otra mitad (el 56%) es un residuo heterogéneo en el que entran otros elementos más difíciles de determinar, entre ellos el empeño personal o la suerte. Con estos porcentajes es difícil hablar de igualdad de oportunidades en nuestro país.