Galde, 31, negua/invierno 2021.
Llevamos tiempo discutiendo sobre la degradación paulatina del lenguaje. Mucho se ha dicho sobre como la cultura digital dominante ha ido generando un léxico crecientemente empobrecido frente a aquel, mucho más matizado, que imperaba en la cultura anterior basada en medios impresos. Sin embargo, parece que, en algunos aspectos, el empobrecimiento y la confusión en el uso del lenguaje son independientes del medio de expresión. Así, durante los meses transcurridos desde que empezó la pandemia, se ha venido produciendo una notable degradación o trivialización en la utilización de algunos términos, como «economía», cuyo uso ha derivado en expresiones, vacías y/o carentes por completo de significado.