Crónica Popular, 8 de junio de 2020.
En la anterior entrega, nos ocupamos de la configuración del sistema sanitario catalán desde sus orígenes hasta el final del tripartito. Vimos que el factor diferencial del modelo reside en incorporar a las entidades privadas de salud a la arquitectura general de la sanidad pública configurándolo como un sistema mixto. En cierta medida, este diseño introduce las puertas giratorias dentro del sistema mismo. Por eso ha sido tan habitual el tránsito entre altos directivos de empresas y cargos en el gobierno. Y de ahí a la tercera parte, la economía criminal, no hay más que un paso, que ha sido franqueado en numerosas ocasiones. La casuística de la corrupción en sanidad configura un lienzo tan denso que la anécdota se convierte en categoría.