vientodelnorte/eldiario.es, 20 de mayo de 2021.
Desde los tiempos de la Transición la acción reivindicativa viene generando en el País Vasco potentes movimientos de masas, sean específicos o de carácter global. Hace más de cuatro décadas destacó por su relevancia política y capacidad movilizadora el activismo antinuclear. El más reciente, el movimiento de pensionistas, surgió en Bizkaia en enero del 2018. Además de la relevancia como dinámica de grupos, un rasgo básico que se repite en movimientos sociales vascos es el empeño de la Izquierda Abertzale (IA) por patrimonializarlos e integrarlos en su proyecto soberanista. Tal es el hilo conductor de este análisis.