nuevatribuna.es, 4 de febrero de 2020.
Cuando el Reino Unido (RU) despertó el pasado 1 de febrero, la Unión Europea (UE) seguía allí. A pesar de la ruptura formal con la UE, el RU se mantendrá durante un periodo transitorio de once meses dentro del mercado único y la unión aduanera, sometido a los mismos reglamentos, normas y obligaciones que rigen para todos los miembros. Consumado el divorcio, resta negociar el acuerdo que ordenará las relaciones entre el RU y la UE a partir de año 2021. Hasta entonces, nada o muy poco cambia.