Mientras Tanto, 31 de agosto de 2020.
I
La sociedad española ha padecido un enorme batacazo por la crisis del Covid; se han
vuelto a disparar los niveles de pobreza y de desempleo, y muchas actividades
económicas están en una situación de grave postración. Pasear por el centro de
Barcelona ofrece un espectáculo de crisis que nadie hubiera previsto hace un año, y
explica que haya una demanda generalizada de plan de reflotamiento. Los presupuestos
públicos constituyen el principal instrumento económico que tiene el Gobierno para
intervenir. Ello tanto desde un punto de vista macroeconómico ―pues el tamaño del
gasto tiene un impacto importante sobre el conjunto de la actividad― como
microeconómico, al determinar a qué sectores concretos beneficia más o menos y
quiénes van a correr con su financiación. Es obvio, por tanto, que la reconstrucción pasa
en primer lugar por la aprobación de un nuevo presupuesto. Y que las características del
mismo van a influir sobre el tipo de reconstrucción por la que se aboga.