elDiario.es, 11 de enero de 2021.
En horas bajas ambos movimientos, el vasco y el estatal, coinciden
en la fobia al Pacto de Toledo. En uno y otro caso deberían
centrarse en objetivos concretos, precisando cual es el mayor
obstáculo para conseguirlos.
«Todo se desvanece; se salva el recuerdo»
Albert Camus
Como los imperios o un conflicto social, el movimiento de pensionistas ha recorrido en
el transcurso de tres años tres fases: ascenso, consolidación y declive. En Bizkaia,
donde mayor auge y protagonismo logró, surge de forma espontánea en Barakaldo y en
Bilbao el 15 de enero de 2018. Su mayor momento de gloria fue la manifestación del 17
de marzo de 2018, apoyada por todos los sindicatos y partidos (menos el PP). Según la
policía municipal acudieron 115.000 personas. COESPE a nivel estatal, en Euskadi
MPB y otras plataformas, contribuyeron incluso a la caída del gobierno de Rajoy en la
moción de censura del 1 de junio de 2018. Al estabilizarse el conflicto disminuye de
forma progresiva la participación en las movilizaciones.