Viento del Norte/eldiario.es, 27 de septiembre de 2022.
Uno de los atajos a los que recurren los poderes que controlan la economía de mercado
cuando las leyes de la oferta y la demanda no sirven para regular la relación entre precios y
salarios es el pacto de rentas. El método es tan simple como perverso: consiste en frenar los
salarios para que, al perder poder adquisitivo, la clase trabajadora reduzca su nivel de
consumo y bajen los precios. El pacto de rentas es un debate instalado en el conjunto de
Europa a consecuencia de la escalada de los precios energéticos y de materias primas,
provocada por la guerra de Ucrania. Aunque el Gobierno dice que en esa operación no
entrarán las pensiones, podría ser la ocasión idónea para impulsar un pacto de rentas
específico, de signo contrario a los habituales. Supondría moderar la subida de las pensiones
altas para compensar a las bajas, a fin de reducir el desequilibrio entre unas y otras.