El País, 3 de octubre de 2019.
Los Estados de la Unión Africana quieren terminar con la subalimentación en el continente para 2025 y han encontrado en los datos abiertos un modo de .encaminar sus políticas hacia el cumplimiento del objetivo.
El hambre en África pasará a la historia a partir del 2025. Al menos, a eso se han comprometido los Estados miembros de la Unión Africana que se han agrupado para aplicar dentro de sus fronteras unas políticas que avancen hacia este objetivo común. Para lograrlo, tienen claro que deberán trabajar codo con codo, apostar por la agricultura y hacer uso de una materia prima con mucho futuro: los datos abiertos.
La Declaración de Malabo, aprobada en 2014, plantea objetivos ambiciosos. No solo pretende terminar con el hambre, sino también reducir la pobreza a la mitad e introducir a las mujeres y a los jóvenes en las cadenas de producción agrícolas en un crecimiento económico que mejore la vida de todos. Y quiere lograrlo antes de que termine 2025.