elcorreo.com, 22 de julio de 2018
Tras un largo periodo de incubación de más de cuatro años, cuando todo
indicaba que estaban ausentes las condiciones necesarias para un acuerdo exitoso, la
Ponencia parlamentaria de Autogobierno aprobaba las bases del nuevo ‘Estatus
Político’ del País Vasco, con el exclusivo respaldo –en todo lo que de verdad importa–
del PNV y Bildu (EHB).
Se trata de un embrión inviable, incapaz de prosperar, por las taras genéticas –
políticas y jurídicas– con que ha sido concebido. Sus autores se empeñarán en hacernos
creer lo contrario. Tratarán de obtener réditos políticos mientras, aparentemente, la
gestación siga su curso; y también cuando fracase: la culpa será de quienes no respetan
la voluntad de la sociedad vasca.