eldiario.es, 25 de diciembre de 2018.
Vox no cuantifica ni siquiera de manera aproximada la pérdida de
ingresos que supondría su reforma.
El conjunto de medidas propuestas por Vox conforman el mayor
paquete de rebajas fiscales para los ricos de nuestra historia.
La «revolucionaria» y generalizada bajada de impuestos propuesta por Vox en sus cien
«medidas urgentes» de Vistalegre hay que tomársela con cautela, como todo lo que
viene de esta formación. Entraña sin duda una caída de ingresos públicos inédita, pero
ni es tan generalizada ni afecta por igual a toda la población. Todos los impuestos que
se quiere reducir drásticamente o suprimir poseen un rasgo común: son impuestos
directos. Salvo una rebaja de IVA a productos y fármacos infantiles y geriátricos,
quedan intactos los tributos indirectos, que son los que, como nos enseñara Ramón
Tamames en su clásica Estructura económica de España, «en relación a las rentas
percibidas gravan proporcionalmente más a las clases media y trabajadora».